Autoridades rebeldes dijeron que recibió un disparo en la sien en medio de un tiroteo, pero otros testimonios y videos suscitan una explicación distinta de lo ocurridoCrédito foto: AFP "Le anunciamos al mundo que Khadafi murió a manos de los revolucionarios", dijo el vocero del Consejo Nacional de Transición (CNT) Abdel Hafez Ghoga, desde Bengasi, la ciudad que lideró la insurrección.
"Khadafi viajaba en un jeep cuando los rebeldes abrieron fuego. Trató de escapar y se refugió en un caño de saneamiento", indicó por su parte Mohamed Leith, comandante de las fuerzas del nuevo régimen.
El primer ministro interino del CNT, Mahmud Jibril, señaló en cambio que "cuando lo encontraron (a Khadafi), estaba bien de salud y llevaba un arma". Pero "al arrancar el vehículo, se vio implicado en un tiroteo entre combatientes pro Khadafi y revolucionarios, y murió de un disparo en la cabeza", añadió. "Estaba vivo hasta su llegada al hospital" de Misrata, precisó el jefe del ejecutivo libio.
Resulta claro que las diversas fuentes rebeldes no se ponen de acuerdo en la versión que han ofrecido a los medios de comunicación.
Las imágenes de los teléfonos celulares muestran, sin embargo, a un Khadafi ensangrentado tanto cuando estaba vivo como después de recibir el disparo en la sien, lo que hace dudar de la mayoría las declaraciones insurgentes.
El primero en refutar las afirmaciones rebeldes ha sido el médico Ibrahim Tika, un forense que tuvo la oportunidad de examinar el cadáver del coronel y que señaló a la cadena de televisión Al Arabiya que el ex líder libio murió por un disparo de bala en la cabeza.
"Khadafi estaba vivo cuando fue capturado. Ligeramente herido, pero vivo. Después recibió una bala en la sien que salió por la frente y otra bala en el estómago que le causó importantes daños", explicó.
También recela de la versión insurgente el vocero de de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, Rupert Colville. "Vistos de manera conjunta, los dos videos tomados con celulares que han aparecido, en uno de los cuales (Khadafi) está vivo y en el otro muerto, son muy perturbadores", declaró.
Tanto la Comisión para los Derechos Humanos de la ONU como Amnistía Internacional han pedido una investigación sobre su muerte.
Todo se inició cuando un avión-caza francés de la OTAN atacó un convoy a las afueras de la ciudad de Sirte, en el que luego resultó que viajaba Khadafi. El depuesto coronel logró escapar y junto con algunos seguidores se escondió en unas tuberías que forman parte del desagüe de la Sirte.
Uno de los insurgentes presentes en el momento, Salem Bakeer, indicó a la agencia Reuters: "Al principio les disparamos con armas antiaéreas, pero no tenía sentido. Después caminamos. Uno de los hombres de Khadafi nos hizo señas al aire portando su rifle... y tan pronto como vio mi cara comenzó a dispararme", agregó.
"Creo que Khadafi le dijo en un momento que dejaran de disparar. 'Mi señor está aquí, mi señor está aquí', decía 'Muammar Khadafi está aquí y está herido'"
A partir de aquí, surgen los videos que se han difundido en Internet. Varios de ellos demuestran que Khadafi estaba vivo cuando fue capturado. Después aparece otro en el que lo patean. Un tercer registro muestra a Khadafi aparentemente muerto sobre el suelo, mientras que los combatientes le dan la vuelta al cuerpo boca abajo, ya inerte y con heridas en la cabeza y en el abdomen.
El primer ministro interino del CNT, Mahmud Jibril, señaló en cambio que "cuando lo encontraron (a Khadafi), estaba bien de salud y llevaba un arma". Pero "al arrancar el vehículo, se vio implicado en un tiroteo entre combatientes pro Khadafi y revolucionarios, y murió de un disparo en la cabeza", añadió. "Estaba vivo hasta su llegada al hospital" de Misrata, precisó el jefe del ejecutivo libio.
Resulta claro que las diversas fuentes rebeldes no se ponen de acuerdo en la versión que han ofrecido a los medios de comunicación.
Las imágenes de los teléfonos celulares muestran, sin embargo, a un Khadafi ensangrentado tanto cuando estaba vivo como después de recibir el disparo en la sien, lo que hace dudar de la mayoría las declaraciones insurgentes.
El primero en refutar las afirmaciones rebeldes ha sido el médico Ibrahim Tika, un forense que tuvo la oportunidad de examinar el cadáver del coronel y que señaló a la cadena de televisión Al Arabiya que el ex líder libio murió por un disparo de bala en la cabeza.
"Khadafi estaba vivo cuando fue capturado. Ligeramente herido, pero vivo. Después recibió una bala en la sien que salió por la frente y otra bala en el estómago que le causó importantes daños", explicó.
También recela de la versión insurgente el vocero de de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, Rupert Colville. "Vistos de manera conjunta, los dos videos tomados con celulares que han aparecido, en uno de los cuales (Khadafi) está vivo y en el otro muerto, son muy perturbadores", declaró.
Tanto la Comisión para los Derechos Humanos de la ONU como Amnistía Internacional han pedido una investigación sobre su muerte.
Todo se inició cuando un avión-caza francés de la OTAN atacó un convoy a las afueras de la ciudad de Sirte, en el que luego resultó que viajaba Khadafi. El depuesto coronel logró escapar y junto con algunos seguidores se escondió en unas tuberías que forman parte del desagüe de la Sirte.
Uno de los insurgentes presentes en el momento, Salem Bakeer, indicó a la agencia Reuters: "Al principio les disparamos con armas antiaéreas, pero no tenía sentido. Después caminamos. Uno de los hombres de Khadafi nos hizo señas al aire portando su rifle... y tan pronto como vio mi cara comenzó a dispararme", agregó.
"Creo que Khadafi le dijo en un momento que dejaran de disparar. 'Mi señor está aquí, mi señor está aquí', decía 'Muammar Khadafi está aquí y está herido'"
A partir de aquí, surgen los videos que se han difundido en Internet. Varios de ellos demuestran que Khadafi estaba vivo cuando fue capturado. Después aparece otro en el que lo patean. Un tercer registro muestra a Khadafi aparentemente muerto sobre el suelo, mientras que los combatientes le dan la vuelta al cuerpo boca abajo, ya inerte y con heridas en la cabeza y en el abdomen.
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